Esta simpática comedia de noventa y dos minutos cumple su objetivo de entretener y arrancar risas con dignidad, aunque sin destacar de manera sobresaliente. Las interpretaciones, realizadas por comediantes populares y talentosos, son sólidas y ajustadas a lo que se espera de ellos. La película, sin embargo, presenta algunos altibajos en su tercio final, con secuencias que parecen forzadas y que no mantienen el nivel de comicidad establecido al principio. A pesar de esto, la trama, concebida como una road movie, ofrece diversión al enlazar una variedad de personajes, algunos extravagantes, gracias al guion de Gerardo Boneque. |