Como enfermera de hospicio que ha trabajado en muchas instituciones de cuidado de la memoria, evito ver cualquier tipo de película sobre atención médica. Esta película fue extrañamente precisa no solo en la vida dentro de las instalaciones, sino también en la progresión de la enfermedad. Exploró (con tanta precisión) el impacto de la enfermedad en la familia y las interacciones entre los cuidadores capacitados. Tuve una paciente que era ingeniera y podía enseñarme sobre el tema todo el día, así que aprecié que la cineasta le permitiera mostrar sus habilidades culinarias que estaban profundamente arraigadas en su mente. ¡Y quiero la receta del borscht! Esta fue mi película favorita en el NewNext Film Festival. |