Una nueva e interesante revisión del género de los tiburones en la que unos gángsters australianos de los años 40 van en busca de un tesoro mientras se enfrentan a un viscoso tiburón toro. Un tributo spielbergiano a la India y a Tiburón en forma de mezcla de géneros que impresionará a los que pensaban que el género de los tiburones había muerto hace mucho tiempo. No es la más matizada de las películas de Matthew Holmes, pero es otro esfuerzo impresionante que demuestra que es uno de los directores australianos más interesantes de la actualidad. |