Durante la Segunda Guerra Mundial el mayor australiano Jack Celliers (David Bowie) llega a un campo de prisioneros japonés. El comandante del campo, el capitán Yonoi (Ryuichi Sakamoto) impone valores como la disciplina, el honor y la gloria al más puro estilo nipón, pero su celo oculta una homosexualidad reprimida ya que desvelarla le reportaría la ignominia absoluta. El comandante en su extremo celo en el honor y la gloria, afirma que los soldados aliados son cobardes al entregarse en vez de suicidarse.
El argumento se complicará al enamorarse el comandante de Jack Celliers provocando no pocas tensiones entre guardianes y prisioneros, a lo que se debe añadir el choque de la mentalidad nipona contra la británica. Uno de los prisioneros, el teniente coronel John Lawrence (Tom Conti) tratará de explicar a sus compañeros la forma de pensar de los japoneses, pero éstos le considerarán un traidor. |