Críticas de la prensa de GREED

Una sátira gloriosa (...) El viaje es muy entretenido y cuenta con un Coogan en plena forma

Es muy entretenida (...) Si tienes apetito para una mirada inteligente y satírica a un tema serio, 'Greed' es buena

Steve Coogan resplandece en una sátira alocada sobre los mega-ricos (...) 'Greed' no es especialmente perspicaz en lo que respeta al dinero o al poder

Ofrece humor pero pocas sorpresas y poco corazón. No hay afecto por este hombre y el resultado es un poco unidimensional

Es bastante buena. Pero podría haber sido mejor. Tiene ciertos méritos, pero merecemos una sátira más creativa

Una visión entretenida de los aspectos desagradables de los ricos y guapos que, al final, intenta abarcar demasiado

La comicidad impera sobre el drama de un billonario tan exótico como mezquino

Winterbottom no consigue que el humor esté al servicio del tema y en lugar de eso lanza cosas irregulares sobre los realities de la tv (...) No es buena

Una sátira caricaturesca que malgasta a Steve Coogan y no es capaz de encontrar el tono apropiado

Una película floja pero interesante que sólo logra sorprender al final, cuando por un momento realmente se comporta como una crítica sobre la justicia económica global. 

Una sátira disfrutablemente biliosa (...) Michael Winterbotton ofrece un cóctel embriagador de absurdez y profundidad 

Una película hilarante (...) Es una de las mejores obras de Winterbottom, lo cual ya es mucho decir, dada la calidad de su filmografía 

Un retrato con garra, pero superficial, de cómo el capitalismo distancia a los ricos de sus consecuencias (...) su ataque de costado a los ultra-ricos es demasiado obvio para sacar sangre o poner los pelos de punta 

A veces parece que estamos ante una presentación furiosa de PowerPoint (...) Coogan siempre ha tenido ingenio y aquí lo demuestra. Aun así, 'Greed' es superficial 

Un tema digno que no se aprovecha. Al intentar abarcar tanto, 'Greed' acaba perdiendo el norte. Aunque por momentos es entretenida 

Una sátira política bastante obvia y muy poco sutil. (...) Winterbottom viene intentando darle un tinte político y crítico a la mayoría de sus películas. Pero ya no parece encontrar la fórmula ni el talento para hacerlo de manera efectiva.