Este drama muy serio, basado en un incidente real, explora el trabajo incesante que puso a una joven madre que vivía en aislamiento rural en la situación de ser acusada de haber arrojado a sus hijos a un pozo. Su marido es un hombre poco imaginativo y obsesionado con el trabajo que no puede ver que su arduo trabajo constante sin ningún apoyo o simpatía de nadie está llevando a esta sensible mujer a considerar el suicidio. Cuando el tipo grosero descubre que su esposa y sus tres hijos han desaparecido, llama a la policía y comienza una persecución. La policía descubre con vida al niño mayor y descubre que la madre intentó ahogarse, pero sobrevivió. Los dos niños más pequeños seguían desaparecidos.
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