Críticas de la prensa de LOS INSÓLITOS PECES GATO

Una película de tono naturalista con personajes vivos, donde tanto se habla de la vida como de la muerte, con elocuencia desarmante. Excelentes set pieces

Nunca deja de ser una comedia costumbrista cuidada y sensible, narrada con una frescura y una solvencia infrecuentes en una directora debutante e interpretada por un elenco irresistible.

Combina novedosamente la comedia familiar y las intensidades de un drama centrado en una enfermedad terminal.

La primera película de la mexicana Claudia Sainte-Luce luce ese aire «indie» y mezcla el color y los sentimientos con unos personajes embadurnados de una atractiva extravagancia

A pesar de que su guión necesitaría ser más fuerte, la primeriza directora demuestra una satisfactoria confianza tras la cámara. 

La escritora y directora Claudia Sainte-Luce se anuncia a sí misma como un nuevo talento con 'Los insólitos peces gato', un sobresaliente debut con mucho corazón y encanto. 

Un cuento claustrofóbico sobre la familia, la mortalidad y la excentricidad que comienza siendo nervioso y termina siendo culebronesco. 

Si hay una cierta profundidad que le falta a 'Los insólitos peces gato', la película da rienda suelta a los pequeños placeres y a la intensidad de una historia corta que avanza poco a poco. 

Este glorioso debut de 2013 de la directora y guionista mexicana Claudia Sainte-Luce toma una de las premisas más melodramáticas y deterioradas y la convierte en algo espontáneo y nuevo. 

Debut emotivo y poco estridente cuyo contenido, en otras manos, podría alentar un empacho de sensiblería mal entendida 

Emoción, sentimiento, honestidad. (...) sincera emoción; puro, sincero sentimiento, el que no se declama, pero se contagia desde las imágenes, el que los personajes expresan más con sus miradas que con sus palabras. 

Aunque por momentos parece estar a punto de caer en un pozo lacrimógeno, Sainte Luce logra eludir con bastante elegancia la sensiblería. 

Aunque la sinopsis de este film daría como resultado un compilado de fórmulas –encuentro entre dos distintos, una paciente terminal de HIV–, la directora logra que eso esté protagonizado por personajes que están más allá del mero vehículo dramático. 

Combina una historia con mucho de su propia experiencia para reflexionar sobre la soledad, el miedo al futuro y las sobre la soledad, con una mirada amorosa sobre sus criaturas que la alejan del golpe bajo a pesar de los temas que toca el film. 

El tono es amable e invita a la identificación(...), aunque por momentos se exagera un poco en esa candidez en un estilo que recuerda a cierto cine indie americano. 

Un relato convincente sobre el amor, la amistad, la vida, la muerte y la solidaridad. Se aleja de sentimentalismos. 

No es el retrato de una familia de tantas, sino el de un arreglo familiar excepcional. Algo novedoso en el cine mexicano, algo también muy disfrutable. 

La interacción entre los personajes femeninos no equivale a un discurso feminista. El valor de esta cinta –que también rompe estereotipos– va más allá de las lecturas de género.  

Pudo llevar al melodramón, pero la directora mexicana Claudia Sainte Luce eligió el buen humor, de un modo natural, reconocible.