Críticas de la prensa de LOS ÚLTIMOS ROMÁNTICOS

Un policial con toques de comedia que resulta por momentos bastante liviana y entretenida, aunque su planteo es más interesante que su resolución.

Intenta trabajar con el humor mordaz, los toques de cinismo y el suspenso atrapante que suelen tener las mejores películas de los Coen. En ese plan, consigue algunos buenos momentos y también trastabilla en otros mucho más convencionales. 

El inconveniente esencial de la creación de Drak (...) es la falta de tensión dramática, un escollo que, a pesar de la constante sucesión de causas y efectos, atenta contra la aparición de cualquier clase de emoción. 

Gira en falso con esas forzadas vueltas argumentales tardías que, a puro sarcasmo, menosprecian a esos personajes que, necesitados de una segunda oportunidad, buscaron atajos hacia la redención. 

Buenos los chascarrillos, el ritmo pausado y los acordes musicales, tan incisivos como insidiosos, que compuso Gustavo Pomeranec. Puede advertirse un par de saltitos argumentales, pero no molestan.