| La anterior entrega de la saga resultó ser toda una obra maestra del cine de acción palomitera así que esta lo tenía difícil para aguantar la comparación. Sin embargo podemos decir que ha pasado la prueba con nota, resultando ser un fantástico entretenimiento aunque, eso sí, sin mayores pretensiones. Quizá el director, Christopher McQuarrie, no haya conseguido dotar de su particular sello a la cinta pero la historia transcurre a buen ritmo y sin altibajos, con un acabado técnico impecable y con unas secuencias de acción que rayan la perfección tanto en su concepción como en su ejecución. El pero que se le puede poner es una cierta carencia de originalidad ya que las ideas y giros ya las hemos visto en otras cintas incluso de la propia saga. Todos los actores cumplen en sus papeles, especialmente un Tom Cruise tan solvente como de costumbre. Entre las novedades del reparto nos quedamos con Rebecca Ferguson - que consigue situarse en un plano de igualdad física e intelectual con nuestro protagonista-. En suma, estamos ante un gran espectáculo cinematográfico un poquito lastrado por su falta de ambición y originalidad. Recomendable entretenimiento veraniego. |
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