Críticas de la prensa de NOCTURAMA

El punto fuerte de 'Nocturama' reside en su reconocimiento de que ninguna línea de pensamiento o crítica puede explicar el abanico de complejidades inherentes a una situación histórica dada

'Nocturama' hace lo único que no debería: hacer que el terrorismo doméstico parezca guay (...) El acto final es tan inquietante como emocionante

El momento oportuno lo es todo y desafortunadamente, es el caso de 'Nocturama' (...) La reticencia de la película a ofrecer alguna verdadera justificación de sus hechos puede parecer notablemente superficial a la luz de los recientes acontecimientos 

El controvertido retrato de Bonello de unos radicales parisinos planeando ataques terroristas por la ciudad, renuncia a explicar lo inexplicable (...) Un gesto magnético y puramente cinematográfico 

Dotada con un peculiar reparto joven y un verdadero brío cinematográfico, hay un prolongado alimento para la reflexión en esta aventura artísticamente coherente, deliciosamente tensa y al borde de lo surrealista 

Hace preguntas difíciles, pero frustra porque ofrece pocas respuestas (...) Hipnótica (...) Ideológicamente, parece un revoltijo deliberado e incompleto 

Es un gran paso hacia delante para Bonello, aportando mucho material para pensar, pero que finalmente sólo sea una buena película es una pena dado lo cerca que está de la grandeza. 

Una provocadora, irreverente y desasosegada aproximación al terrorismo. (...) tan brillante y profunda como insultantemente exhibicionista. 

La película es inquietante por su pesimismo extremo, en el que al sin salida del hiperconsumo parece oponérsele el sin salida del terror ciego. Hasta que llega el sin salida de la represión despiadada, y el círculo se cierra. 

Una obra fascinante. (...) las imágenes son exquisitas pero no superficiales; las combinaciones de colores y disposición de personajes y elementos en el plano tienen una tremenda fuerza expresiva. 

Bonello no se carga de alegorías ni símbolos, sino que retrata, incluso, la más terrible de las crueldades. Película finalista y pesimista, es también una lección de cine, con sus encuadres anchos y sus personajes difusos. Trate de no perdérsela. 

La nueva película de Bertrand Bonello es de esas que ponen el dedo en la llaga en el momento y en el “lugar” que más duele. 

El valiente Bertrand Bonello propone un escenario donde los terroristas no sean sino jóvenes aburridos, manipulables, hartos de no ver futuro. Al final no hay condescendencia: el paraíso no existe para los enemigos del Estado. 

Bonello se deshace de cualquier tipo de exposición y nos obliga no sólo a ver sino a mirar, no sólo a captar sino a comprender. 

Es un largometraje atrevido y extraño. Uno que sorprende con una belleza inusitada, uno que revela un retrato irónico de sus criaturas. Bonello ha hecho una película que capta el estado emocional de nuestros días.