Stephen Holden (The New York Times) | |
Película cautelosa y políticamente imparcial (...) el fusible que debería hacer saltar la chispa, para hacerla estallar emocionalmente, se apaga después de unos esporádicos silbidos y chisporroteos. |
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Sam Adams (Los Angeles Times) | |
El relato puede que sea dolorosamente real, pero es demasiado 'cliché'. (...) especialmente decepcionante cuando se la compara con los documentales The War Tapes y -el excelente- Home Front, intensas e incisivas exploraciones de la desilusión y la rabia |
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