| El debut de Mar Targarona en la dirección no ha podido ser más desafortunado con esta lamentable pérdida de tiempo. La misma historia de siempre, sin el más pequeño giro que sorprenda al espectador (todas las trampas del guión se ven venir de lejos), con un guión repleto de diálogos de baratillo. Tartagona es incapaz de articular el relato, resaltando los momentos más absurdos del guión y realizando un trabajo visual bastante descuidado que no ayuda precisamente a crear la atmósfera necesaria en el filme. Blanca Portillo hace lo que puede por sostener a su personaje pero conforme avanza el metraje pierde toda credibilidad y da hasta pena ver a José Coronado en algo así. Una de las peores películas estrenadas en 2016. |
U.S.A.
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