Críticas de la prensa de SEXO EN NUEVA YORK 2

No hay grandes novedades (...) los diálogos frívolos, procaces y chispeantes (...) y las lecciones sobre el amor y el matrimonio son de libro de autoayuda. Pero, todo, con cierta gracia siempre y cuando uno se la sepa encontrar.

El tono cómico de la serie, e incluso de la primera película, los 'Cosmos', los stilettos y el iluminado Manhattan, desaparece. (...) se antoja al final una farsa, a veces ridícula y vergonzante

La insípida 'Sex and the City 2' tropieza de mala manera. (...) Los fans de la serie de la HBO serían inteligentes si diesen media vuelta en sus 'manolos' y se alejasen de este mortificante lío

Los personajes son cabezas huecas de peso ligero que viven en un mundo en el que no necesitan decir 3 frases seguidas. (...) El estilo visual del film es artrítico.

Luego de la flojísima primera parte, era lógico presuponer que esta secuela iba a ser aunque más no fuese algo mejor. Le alcanzaba con poco, pero no. Todo aquí luce menos espontáneo, más artificial, más prefabricado que nunca.

Una innecesaria y descuidada secuela (...) la sátira pierde fuerza, la ironía se atrofia y la diversión es más floja. 

Nunca parece acabarse. (...) Si ellas parecen menos maravillosas ahora, no es porque haya disminuido el esfuerzo o el encanto de las actrices que las interpretan. Es por la película en sí, y tal vez porque la cultura que representan, ha perdido interés 

Disparatado escaparate. (...) tras una decente primera hora, la franquicia se hunde 

No tiene argumento alguno, ni ingenio o inteligencia, y es un 50% más larga de lo justificable. Ofende a sus espectadores naturales (...) ofende a quienes crecieron viendo por la tele a sus protagonistas y les han sido leales; y ofende a los personajes mismos 

Lo que se extraña es el desparpajo, que aquí ya ha mudado a rutina rancia. 

Entre tanto taco brilloso y tantas dunas del Sahara cada tanto aparece el destello de aquello que convirtió a estas mujeres en íconos globalizados. 

Sí, señores: para llenar dos horas y media de secuela, a los creativos de Sex and the City no se les ocurrió mejor idea que mandar a las chicas más fashion victims de todo Occidente... a Medio Oriente.