Críticas de la prensa de ÚLTIMOS DÍAS EN EL DESIERTO

Garcia ha logrado lo extraordinario con 'Last Days in the Desert', infundiendo el genuino impacto de lo novedoso en una de las historias más conocidas del mundo

Una meditación inteligente y hermosa sobre padres e hijos (y el Padre y el Hijo) que es lenta, pero nunca aburrida.

[García] rinde homenaje a ese clima de tensa serenidad desde una puesta en escena austera y meditativa, apoyado en la excelente fotografía (...) lo que queda (...) es la emoción de lo humano

García nunca opta por un personaje que busque subir en un pedestal de deidad o mártir, sino al contrario, su Jesús es humano y fallido, recordando inescapablemente al logrado por Willem Dafoe en 'La última tentación de Cristo' de Martin Scorsese.

Visualmente poderosa (...) quiere ser una lectura profundamente humana del hombre (...) acierta a componer un sobrio y conmovedor retrato de asuntos como el sacrificio

Honradez deontológica del director, que levanta en medio de la nada una rareza hermosa y profunda

El resultado es por momentos conmovedor pero no especialmente transgresor, y el empeño por la contención mitiga su capacidad para trascender.

García juega a las adivinanzas con el espectador, al que somete a la misma prueba de Jesús tras 40 días en el desierto, ese limbo.

No deja a un lado las cuestiones espirituales (...) pero sí se centra en cuestiones más terrenales como el respeto (...) y eso tan scorsesiano que es el silencio.

No importa cuanto lo he intentado, no he podido, no puedo y nunca seré capaz de ver a Ewan McGregor como a Jesucristo

Una pelicula loable y conmovedora, 'Last Days In The Desert' puede ser profundamente enternecedora en algunos momentos, pero con lo sobria y elegante que es, la película nunca va más allá. 

Esta versión de García, aunque bella físicamente, resulta intelectualmente opaca y cautelosa desde el punto de vista creativo. 

Una silenciosa, cautivadora y muy hermosa explicación sobre la época de Jesús en el desierto antes del comienzo de su ministerio. 

Tanto si aceptas o no los dogmas del cristianismo, 'Last Days in the Desert', la austera descripción de Rodrigo Garcia de las tentaciones de Cristo, ofrece un retrato discretamente atractivo del lado humano de Jesús 

La doble interpretación de Ewan McGregor como Jesús y su torturador demoníaco asegura que 'Last Days In The Desert' nunca pierda la pista de su gracia y humildad. 

La película avanza hacia un epílogo sintético, resonante, terrenal y al tiempo enigmático, que eleva el alcance de esta paradójica película laica sobre la fe. 

Los largos silencios con diálogos inconclusos y la narrativa que se detiene demasiado en la contemplación, imponen una distancia entre el personaje y el espectador que, sin embargo, puede deleitarse con la belleza del paisaje y la exquisita fotografía. 

Un regodeo estilístico con fotografía de Emmanuel Lubezky, que nunca propone nada al género y es una mera representación sobre una ficción de lo que Jesucristo hizo en el desierto. 

Más allá de disquisiciones teológicas y planteamientos metafísicos, esta inteligente cinta plantea un reto en su apreciación estética. 

Un relato que le exige al espectador tanto en su cinefilia y como en su espiritualidad,(...) la película de un cineasta inteligente y profundo, a quien le gusta hacer preguntas sobre asuntos esenciales y dar opciones de respuestas en sus películas.