Esta docuserie tiene sus altos y bajos. Por un lado, es interesante ver el detrás de escena del juicio y conocer la perspectiva de Karen Read. Sin embargo, en algunos momentos sentí que se centraban demasiado en teorías de conspiración sin aportar pruebas contundentes. Además, la narrativa puede volverse repetitiva, especialmente si ya estás familiarizado con el caso. No está mal para pasar el rato.
Estos primeros cuatro episodios me tuvieron pegado a la pantalla de principio a fin. Cada episodio desentraña detalles que te hacen cuestionar todo. La forma en que presentan las teorías de conspiración y el posible encubrimiento policial es simplemente fascinante. Además, tener acceso directo a Karen Read y su equipo legal le da una autenticidad que pocas veces se ve en este tipo de producciones.
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