El primer episodio de la nueva temporada me ha dejado con sentimientos encontrados. Por un lado, Ryan Smith hace un trabajo decente presentando los casos y proporcionando detalles intrigantes. Sin embargo, sentí que en algunos momentos la narrativa se volvía un poco lenta y repetitiva. Además, aunque los casos son interesantes, la presentación no aportó nada realmente novedoso al género de documentales de crímenes reales. Es un inicio aceptable, pero espero que los próximos episodios aporten más dinamismo y profundidad. |