El primer episodio de la segunda temporada de The Last of Us es una joya televisiva.La dirección de Craig Mazin es impecable, y las actuaciones de Pedro Pascal y Bella Ramsey son profundamente conmovedoras.La introducción de nuevos personajes y la evolución de la relación entre Joel y Ellie aportan una riqueza emocional que eleva la serie a nuevas alturas.Sin duda, una continuación que no decepciona.
El regreso de The Last of Us es bienvenido, y el primer episodio ofrece momentos destacados, especialmente en el desarrollo de los personajes.Sin embargo, el ritmo narrativo es desigual, con escenas que se sienten prolongadas y otras que pasan demasiado rápido.La introducción de nuevos elementos promete, pero se necesita más cohesión para mantener el impacto emocional constante.
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