"Drácula: Año cero’ narrará una historia original sobre Vlad Tepes o Vlad el Empalador, el príncipe rumano en el que se inspiró Bram Stoker para crear al vampiro más famoso de todos los tiempos en su novela de 1897. La película se centraría en cómo Vlad se convirtió en la fantástica criatura que todos conocemos, en las elecciones que le llevaron a ese final y en las tragedias que marcaron su vida.
Aburrida historia sobre el origen del vampiro más famosos de todos los tiempos. Narra la vida de Vlad el empalador y los dilemas que le llevaron a convertirse en vampiro. Los efectos generados por ordenador - mención especial para las transformaciones de humano a murciélagos de Drácula - no son suficientes para justificar una historia plagada de tópicos y agujeros de guión; lo de convertir al protagonista en una especie de superhéroe de la Marvel es un auténtico despropósito. Su corta duración ayuda a que no se derrumbe la película antes de llegar al final aunque, eso sí, a cambio de sacrificar el desarrollo de unos personajes que no pasan del mero estereotipo. Pasable.