Produce cierta sorpresa que Peter Farrely, un director al qe asociamos con el cine cómico de excesos ('dos tontos muy tontos' o 'algo pasa con Mary') produzca este filme cálido y sensible, una 'road movie' que se toma como excusa para explorar el viaje interior que experimentan los personajes protagonistas. La realización transpira clasicismo en todos sus planos y el guión tiene un magistral tratamiento de los personajes - mención especial para Viggo Mortensen y Mahershala Ali - que nos robarán el corazón desde el primer momento. Un estupendo tratado sobre el racismo y la conciencia de clase, un clásico desde ya mismo. Recomendada. |