El director zaragozano Miguel Ángel Lamata deja atrás el humor gamberro de sus anteriores películas para mostrarnos en este filme un lado más reflexivo con algunos toques de drama y romance. Aunque la idea de partida resulta original - dos amantes se conocen en una librería e inician un juego para hacer su vida más interesante con la condición de no enamorarse - el guión acaba resultando superficial y previsible, con un exceso de diálogos además. Con todo, la película resulta entretenida y los actores están correctos en sus papeles - lástima de Gabino Diego, que sería deseable que apareciese más en escena -. Una comedia romántica entretenida. |