Adaptación cinematográfica de un libro de memorias de Marcus Luttrell, en el que relata sus experiencias en Afganistán durante 2005. A él (Wahlberg) y a otros marines (Kitsch, Foster) les fue encomendada la misión de liquidar a un líder terrorista. Mientras que sus compañeros murieron en una emboscada de los talibanes, Lutrell logró sobrevivir gracias a la protección de una tribu afgana.
Wahlberg sigue siendo una de nuestras estrellas de cine más fiables y menos actorales de una manera innata, varonil, pero lo suficientemente vulnerable como para parecer un ser humano atrapado en una situación inhumana.