Críticas de la prensa de LION

El final es manipulador en todos los sentidos (...) Pero la buena trama narrativa de 'Lion' y sus refflexivos personajes te absorben tanto en su viaje que merece totalmente la pena

Dev Patel no aparece hasta casi pasada una hora en 'Lion': pero cuando lo hace, su interpretación potente, conmovedora y con aires de Oscar, llega profundamente

Acercamiento honesto a la adopción, al sentimiento del adoptado y del que adopta -maravillosa Nicole Kidman-, a las piezas pegadas, al inevitable vacío de no saber de dónde venimos y quiénes somos.

'Lion' es una cinta emotiva que vale la pena ver por sus actuaciones y por su increíble historia detrás.

Podría ser una tragedia, pero es uno de esos melodramas que saben dónde y cómo colocar las agujas en el alma del espectador como si fuera un acupunturista chino.

Considerando sólo sus momentos mejor resueltos y efectivos, casi todos ubicados en la primera mitad, calificar 'Lion' como obra tremendamente conmovedora sería incluso quedarse corto

Va de más a menos (...) en India saca jugo a las exóticas localizaciones sin caer en el postalismo (...) Pero tras saltar en el tiempo (...) la vitalidad narrativa es reemplazada por el amaneramiento emocional

Todo está poblado de golpes bajos, de música lacrimosa, de imágenes muchas veces cursis. El niño Sunny Prawar logra que uno se conmueva, pero es nada más un truco fácil. Para llorar a reglamento.

Lo que bien podría haber sido una reflexión sobre la pobreza moral del mundo, pronto se transforma en un melodrama irritante

Una interpretación tremendamente conmovedora de Dev Patel es el alma resiliente de 'Lion' (...) una reflexión sobria, si bien profundamente emotiva, sobre la familia, las raíces y la identidad 

Una historia lacrimógena que se gana las lágrimas (...) 'Lion' está un poco por encima de la clase de sólido drama conservador que parece suscitar su premisa (...) Patel ofrece su interpretación más compleja desde 'Slumdog Millionaire' 

Si alguna vez has sido un niño, has criado a un niño, perdido un niño o encontrado a un niño - o a una madre- esta película te destrozará 

Gracias a la interpretación electrizante y profundamente sutil de Dev Patel, finalmente 'Lion' ofrece el impacto emocional que promete a lo largo de la película 

En su mitad inicial, el novel Garth Davis (...) demuestra que sabe contar una odisea sin apenas palabras (...) Llegada la parte australiana (...) Lion se torna una obra más convencional 

Es un film de cálculo, en el que cada elemento ha sido pensado para conmover al espectador, pero también a los miembros de la Academia que eligen las candidatas a los Oscar. 

El film apela por momentos al trazo grueso a la hora de exponer las diferencias culturales y de clase, pero está construido con destreza y convicción. 

Elude el sentimentalismo hollywoodiano al que era fácil caer. (...) el debutante Garth Davis, que viene del cine publicitario, trata de escaparle al golpe bajo, aunque al final se rinda. 

Se agradece (...) que no se valga ni de golpes bajos ni de música o efectos que acentúen el drama. Los silencios y las miradas aquí sí valen más que mil palabras. (...) Un melodrama que calará profundo en el corazón de los espectadores. 

Frente a una película como la de Garth Davis resulta ingrato señalar el chantaje emocional con el que se disimulan las deficiencias cinematográficas. (...) los buenos sentimientos e intenciones no son suficientes para que un film se vindique a sí mismo. 

Emotiva a la vez que dinámica y con toques de humor, 'Lion' es una cinta efectivamente manipuladora (en el buen sentido) que aprovecha una conmovedora historia real para llevar al espectador a percibir la desesperación, tristeza e incertidumbre. 

Es una película con una estructura muy sencilla hasta tradicional, y desde el principio se apodera de las emociones del espectador. 

El filme es correcto, emotivo e incluso orilla al espectador a conmoverse y derramar alguna que otra lágrima, sin ser manipuladora. La cinta sabe calar y lo hace bien. 

Es una de esas películas en las que, aunque es fácil de predecir casi todo lo que va a ocurrir, lo importante es el viaje, el emocional, el geográfico y el que hace la narración. 

Esta no es una gran película, pero al menos es el trabajo de un director que tuvo la discreción de no exprimir el limón hasta la cáscara. Hay lágrimas que a veces sobran en la cocina. 

En realidad es una encrucijada, tenía la opción dura y terrible de contar la historia de Mantosh, inadaptado, enfermo y destructivo. (...) La Tierra es grande, pero no hay espacio para todos. Hay películas para los que vuelven a casa, pero no para los otros: los que no saben cómo salir. 

El estilo de la película es particular y precioso. 

Un filme que rompe esquemas confirmando que, en efecto, el corazón sabe más que la razón. Excepcional. 

Melodrama de final feliz, con conmovedora simbiosis cultural, chisporrotea distribuyendo felicidad y alegría, dignas de un Hollywood y su “way of life”. 

Al final se llora a moco tendido, y se agradece, aunque los escépticos solo verán en todo esto apenas una propaganda de Google Earth y la Indian Society for Sponsorship and Adoption. Hay gente para todo.