Encuentro un increíble lugar para visionarla porque hay muy poco cine chileno con un punto de vista clase media y pega fuerte que un largometraje con tanta calle se visione en una de las universidades más clase alta de Chile.
Es desde ahí que me alegra mucho el momento en que se encuentra el cine chileno, donde directores como Carlos Leiva y productores como Felipe Azua cuenten esas historias de otras realidades, con un lenguaje tan rico y con géneros fuera del drama. |