After breaking up with his girlfriend, Josh comes to the realization that he is homosexual. With the support of his now ex girlfriend Claire, and his best friend and house mate Tom, Josh must help his mother with her battle with depression and the rest of his family embrace his new found lifestyle.
Gran parte del atractivo de la serie radica en la absurda y naturalista química entre los actores, cuyos personajes mejoran algunos de los imperfectos giros de la trama.
El humor es sutil, casi socarrón, pero brillante en cada rincón. Algunos momentos se vuelven insoportables de ver, sólo porque hemos tomado un afecto inmediato hacia Josh y odiamos ver cómo el mismo estropea las cosas.
Una de esas joyas escasas que presenta un mundo tan maravilloso que te da pena cuando llegas a los créditos del final (...) Es tan inteligente con sus imágenes como con sus diálogos