Tras las revelaciones trascendentales de “INSURGENTE”, Tris (Shailene Woodley) debe escapar con Cuatro (Theo James) e ir más allá de la muralla que rodea Chicago. Por primera vez dejarán la única ciudad y familia que conocen. Una vez fuera, todo aquello que presuponían como cierto pierde cualquier sentido tras la revelación de nuevas verdades. Tris y Cuatro deben decidir rápidamente en quién confiar, mientras se inicia una guerra despiadada que amenaza a toda la humanidad más allá de las paredes que rodean Chicago. Para sobrevivir, Tris se verá forzada a tomar decisiones imposibles sobre el coraje, la lealtad, el sacrificio y el amor.
La peor de las tres entregas que hemos visto hasta ahora. A la apabullante pobreza formal - calmado en momentos de acción e inquieto en los de calma - a la que nos somete el director Robert Schwentke, hay que añadir el paupérrimo acabado de la producción - hay varios efectos especiales que dan el cante -. Lo más interesante - el mundo tras la muralla - apenas se desarrolla, mientras que se dedica excesivo metraje a lo más anodino - la poco creíble relación entre David y Tris -. Los nuevos personajes resultan muy planos por poco trabajados y la definición de los antiguos apenas gana algún matiz nuevo. A pesar de todo lo comentado la cinta resulta entretenida; eso sí, no va a convertirse en ningún referente del género fantástico.